Restaurante Carrer Nou… donde la amistad va de plato en plato.
Todo amante de la buena mesa busca, en mayor o menor grado, un sitio que no sólo ofrezca buena cocina, sino que además sea un lugar perfecto para conversar, sorprenderse con nuevos sabores y sobretodo que sea capaz de eliminar cualquier ruido o estrés exterior para convertir la comida del buen comensal en toda una experiencia.
En esa búsqueda, que a mi parecer cada día está recién comenzando (si el lector desea pensar que la frase anterior es una excusa para seguir comiendo, tiene toda la razón) con una amiga llegamos a almorzar a Carrer Nou, un espacio ubicado en una antigua casona de Miguel Claro, esquina Santa Isabel, que tiene todos los elementos para convertirse en el escape para cambiar la rutina en cualquier momento de la semana.
Al entrar, sorprende gratamente la sencillez del espacio, que combina de manera perfecta las clásicas murallas con una decoración poco pretenciosa, original y con toques acogedores llenos de buen gusto. El recorrido por el lugar sigue siendo una grata sorpresa, con rincones iluminados y un pequeño patio trasero ideal para finalizar el día con un buen trago.
El dueño, como buen anfitrión, nos atendió en la barra del lugar, preparándonos un rico Pisco Sour para empezar a contarnos la historia del lugar y mostrarnos parte de la carta del restaurant, una selección de platos que abarca con talento y sencillez los sabores de la cocina mediterránea y exquisitos toques de autor.
Con el primer descorche de un rico carmenere Marqués de Casa Concha, comenzaron a llegar los platos; nuestro almuerzo empezó con una Girona de Res, deliciosos rollitos de crepe rellenos con Carpaccio de res, servidos con parmesano rallado, finas hierbas y el toque de aceite de oliva perfecto, una entrada suave y fresca, ideal para compartir, tan buena como la segunda entrada, la exquisita Noteolvido, original nombre para una tradicional tortilla de papas española, que en una porción justa y con una preparación a punto, da pie para seguir conversando y disfrutándola poco a poco.
La gran sorpresa fue el Risotto San Fabián de Alico, preparado con Mechada y Setas, original plato, sencillo a simple vista y completamente delicioso, definitivamente una de las estrellas de su carta. Cerramos nuestra jornada de brindis y buena comida con un exquisito Copón Griego, uno de los postres de su precisa carta, que mezcla miel y licor de naranja con yogurt natural servido con salsa de frambuesa, postre que sin duda es un cierre perfecto y fresco para una relajada jornada.
Cuando miré el reloj noté que entre platos, historias y brindis, habían pasado más de tres horas, cosa que poco importó porque esa es precisamente la magia y la propuesta de Carrer Nou, un lugar que sus dueños, con trayectoria en el rubro gastronómico, abrieron con la idea de crear un espacio perfecto, tranquilo y acogedor, donde los almuerzos duran horas y las cenas se convierten en grandes tertulias que se cierran con recordados brindis… si no me creen, vayan y vean lo que sucede después del primer descorche.
CARRER NOU
DIRECCIÓN: Miguel Claro 1802, Providencia
HORARIO DE ATENCIÓN: Lunes a Sábado 13:00 a 16:00 hrs, Lunes a Jueves 19:30 a 00:00 hrs, Viernes y Sábado 19:30 a 01:00 hrs
OTROS PLATOS IMPERDIBLES: Ceviche Carrer Nou, Rellenitas (empanaditas de costillar ahumado), Ensalada Camprodón, Carmelo (Ravioles rellenos con salmón ahumado en salsa carbonara), Magret de pato al punto y en la carta de postres, el Sorbete de Limón de Pica & Vodka.
Comentarios